ANUDAN EL CABO DE UNA CEREZA CON LA LENGUA
19 dic 2009
LAS UÑAS, CORTAS
Yo me corto las uñas al ras.
Soy un soldado.
No araño mis pliegues,
los trastorno.
Los froto
como si se tratara de cachorros,
presionando el anverso terminal
de estas falanges que empujan
suavemente.
Rompo el reloj antiguo.
Anticipo el ritual.
Yo me corto las uñas al ras.
De lado a lado.
Vuelo el arco sobrante. Quiero yemas
que penetren, excaven y humedezcan.
Quiero yemas que me hagan llorar,
estremecida. Contraída y deshecha
lentamente.
Quiero el quinteto de la muerte
en su lugar. Completo.
En cada extremo que asciende
hasta llegar, va mi saliva.
Chupo como un cachorro
mis uñas, mis aliadas.
Desaparecen por delante,
por detrás. Empecinadas.
Uñas de nena con tijera,
cuevas de nena empapada.
Espasmos de nena
en cuatro patas,
que tantea las claves
incluso con la llave
que ha cerrado la puerta
para entrar a jugar.
Foto: Ralph Gibson
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Perséfone querida,
ResponderEliminarya me quedé sin lectura!!
Necesito más!
Más!
Me encantaron todas, la del bus está buenísima!
Dame más.
Saluti
Ya ni un solo post sin lengua lujuriosa.
ResponderEliminarAunque a veces es mejor " a dentelladas secas y calientes"
ResponderEliminarQuerísidima Nina: Te necesitamos en el burdel. En cuanto mis manos se liberen, liberan sus espasmos del día. Una mirada cómplice.
ResponderEliminarTemeraria María Jesús: La lengua lujuriosa va de suyo. Y de mía. Y de tuya. La que habla en lenguas, la que toca y besa.